En contextos políticos cerrados, la alimentación puede ser un arma de propaganda y control, mientras que, «desde abajo», es un sitio simbólico de adaptación y resistencia.
Conseguir alimentos, elaborarlos y comerlos son acciones repetidas y centrales en la vida de cada ser humano.
En espacios autoritarios, sumidos en crisis y desigualdad, donde el desinterés gubernamental es evidente, la comida más que una mera necesidad se vuelve fuente de incertidumbre, ansiedad y frustración.
El presente libro parte de la idea entre Food Monitor Program y la editorial Hypermedia de debatir las intersecciones entre cultura y poder que ofrece la idea de la comida en Cuba.
Para ello, se compilan doce conversaciones con artistas, escritores, intelectuales, e historiadores, que tienen como elemento en común pensar a Cuba. Son cubanos que de una manera u otra han referido la comida en sus obras, y el espacio que esta ocupa en la (de)construcción de la nación.