Un libro necesario. Es un disparo a la chatura de un país que ha producido más nombres que obras.
Los clásicos, la gran literatura, el canon, la discusión y el desacuerdo.
El autor prescribe la razón cínica, el sarcasmo de la escritura al verse inmerso en la angustia de querer ser una potencia expresiva. Más que largos libros escritos, el ensayo (las notas) parece reducirse a una expresión de Ser. Sin duda, este libro corresponde a una etapa post literaria de la tradición narrativa de la cubanidad, cuya expresión y mensaje llegan al oído del ser.